Tte Rey e/ Oficios y Mercaderes.Havana Vieja,
La Habana, Cuba
(+53) 78629383
si
Acerca de
Los Frailes
El Hotel Los Frailes debe su nombre a su proximidad a la Basílica y al Monasterio de San Francisco de Asís en la cercana Plaza de San Francisco. Es un hotel pequeño, muy agradable y original y como muestra de ello es que todo el personal viste como los frailes franciscanos, para intentar hacer de su estancia, un viaje a la vida habanera de siglos atrás.
Otra pequeña particularidad de este lugar es que la mayoría de las habitaciones tienen el estilo de celdas monásticas y las de la planta baja tienen ventanas que dan a la calle Teniente Rey, posibilitando que sean frescas e iluminadas. El bar de la planta baja con sus altas ventas, transmite una impresión muy relajante, desde el cual podrá disfrutar, tras un largo día de recorrido por la clásica ciudad capital, del cuarteto que habitualmente toca allí y que le presentará algunas piezas de nuestra inmensa cultura y tradición.
Una característica muy interesante del diseño del hotel es que ha conservado su cisterna original, la cisterna central de piedra caliza situada en el patio de cada mansión colonial en La Habana Vieja, cubierto de cristal de modo que uno puede ver debajo el agua deliciosamente clara.
Teniente Rey y Villegas, Habana Vieja, La Habana
Iglesia Santo Cristo del Buen Viaje
La Iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje es una iglesia sencilla pero encantadora. Está ubicado en la Plaza del Cristo, en el lado oeste de la Habana Vieja, lejos del centro de la ciudad y las zonas turísticas. La estructura de la iglesia es intrigante por la simplicidad de sus torres y de sus fachadas laterales, en completa armonía con el carácter de las obras del siglo XVII. La iglesia fue construida en 1732 en el mismo lugar donde anteriormente había un santuario franciscano. Hoy en día se ha restaurado solo parcialmente, con sus hermosas vidrieras y techos de colores brillantes que son características más notables. Dentro de la iglesia, la imagen de Jesús en la Cruz entre viajeros y marineros se hizo muy popular porque se pensaba que impedía a las personas que sufrieran daños. Los viernes santos las procesiones parten del Convento de San Francisco de Asís y terminan en la Iglesia del Cristo. Las dimensiones de la plaza se planearon de acuerdo a las procesiones que iban a tener lugar en ella, marcando el final de las catorce cruces o Estaciones de la Cruz. La Plaza del Cristo es un lugar ideal si quiere alejarse de las zonas turísticas y ser testigo de cómo es la verdadera vida cubana.
San Ignacio y Empedrado, Habana Vieja
Plaza de la Catedral
La suntuosa Plaza de la Catedral es el foco de la vida en la Habana Vieja. De particular interés en la Plaza de la Catedral se encuentran la Catedral de la Habana, una iglesia barroca y el Museo de Arte Colonial, ubicado en un bello palacio que data de 1622. Los turistas permanecen en el café al aire libre de El Patio, bebiendo café o mojitos al ritmo del Son Cubano
Calle Mercaderes No.120, Habana Vieja, La Habana
Museo del Tabaco
El Museo del Tabaco se encuentra dentro de un edificio del siglo XVIII que perteneció a la familia Bartolomé Luque, en la calle Mercaderes, La Habana Vieja. Este museo está dedicado a la preservación y exhibición de colecciones relacionadas con las plantaciones, producción y comercialización de tabaco cubano. Exhibe una gran colección de pipas, hojas y otros artículos relacionados, así como una colección de piedras litográficas y máquinas de importantes compañías de cigarros. El museo tiene una pequeña tienda donde podrá obtener diferentes habanos y artículos para fumadores.
Carretera de La Cabana, Habana del Este
Fortaleza de San Carlos de La Cabaña
La gran Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, conocida como 'La Cabaña', que corre junto al puerto, fue construida después de la captura de La Habana por los ingleses en 1763. La mayor de las estructuras militares construidas por España en América, esta fortaleza fue completada en 1774 y su presencia formó un elemento de disuasión completo y efectivo contra los enemigos del país. El polígono, que ocupa un área de alrededor de 10 hectáreas, consta de bastiones, revellines, fosos, pasillos cubiertos, cuarteles, plazas y tiendas. Está impresionantemente bien conservado, y los jardines y las murallas se iluminan románticamente por la noche. Esta fortaleza alberga la espectacular ceremonia nocturna de El Cañonazo de las Nueve, el disparo de un cañón que marcó el cierre de las puertas de la ciudad, una de las tradiciones más antiguas y atractivas de La Habana.